Por Ricardo Gálvez del Bosque
¿Quién no ha tenido un exabrupto lamentable cuando ha comentado sobre algún tema? Le pasa hasta a los mejores. Cuando los reflectores te apuntan y eres una autoridad política, dichos exabruptos o comentarios fuera de lugar pasan factura. Por eso, lo más recomendable para un político es hacer ese ejercicio que nos enseñaron desde pequeños: pensar antes de hablar.
Sin embargo, no todos son exabruptos. A veces se tratan de actos fallidos. Es decir, ponen en manifiesto algún deseo o pensamiento que tienen en el inconsciente. Vamos, es cuando uno se traiciona a sí mismo y desnuda sus verdaderas intenciones ocultas.
Por ejemplo, hace pocos días, el congresista Alejandro Soto (APP) dijo que “si el delincuente más ranqueado o el común delincuente en el país tiene derecho a elegir a su abogado defensor, ¿por qué nosotros no tendríamos derecho a elegir a nuestro abogado o a nuestro propio procurador?”.
¿Qué quería justificar? El hecho de que el Congreso le ha dado un golpe grave a la Procuraduría General de la República, haciendo que cada organismo constitucionalmente autónomo elija a su gusto a su propio procurador. Con dicha norma se pretende subordinar a dicho funcionario ante quienes ostentan el poder de turno. Bajo ese escenario, si algún congresista o grupo de congresistas cometen algunos ilícitos que perjudican al mismo Congreso, el procurador no tendrá independencia para denunciar dichos actos.
Para ser francos, que Soto se compare con el delincuente más ranqueado o con un común delincuente no deja de ser pintoresco.
Otra lamentable declaración fue la de Dina Boluarte cuando comentó sobre futuras marchas en contra de su gobierno. En su alocución lanzó la desafortunada frase “¿Cuántas muertes más quieren?”. Sí, es cierto que luego explica que ella considera que las muertes no las ocasionó su gestión. Pero, vamos, ¿cómo se le ocurre decir eso en un contexto en el que la culpan del asesinato de 49 personas?
¿Torpeza? ¿O acto fallido? Juzgue usted.
Imagen tomada de https://canalb.pe/noticias/politica/presidenta-dina-boluarte-cuantas-muertes-mas-quieren-por-amor-de-dios