Por Ricardo Gálvez del Bosque
En un Gobierno en el que se cambian ministros cada 6 días, Geiner Alvarado fue de los pocos suertudos que ha permanecido ocupando una cartera de manera permanente desde el 29 de Julio del año pasado. ¿Será que su trabajo era súper eficiente e impecable? ¿O todo lo contrario en este “mundo del revés” al que nos ha acostumbrado Pedro Castillo?
El MTC y el Ministerio de Vivienda son las carteras que manejan el mayor presupuesto del país. En ellas han estado los dos ministros más estables: Juan Silva (hoy prófugo de la justicia) y Geiner Alvarado (censurado este último jueves). Ambos, a pesar de los escándalos, permanecieron en sus cargos por tiempo récord, no solo gracias al apoyo de Pedro Castillo, sino también gracias a la complicidad de un Congreso que se hacía de la vista gorda convenientemente.
¿Por qué el Congreso no ejerció su labor de fiscalización contra ambos ministros en los momentos oportunos? Simple: presupuesto. Obras. Conveniencia. Así, las voces que pedían sus interpelaciones y/o censuras resultaron ser minoritarias, las excusas para dilatar dichos procesos hasta el olvido fueron múltiples y vinieron de diversas bancadas, y ambos siguieron actuando con impunidad desde el poder. Toma y daca.
A pesar de que Geiner Alvarado está siendo investigado por la Fiscalía por pertenecer a una organización criminal que entregaba obra pública con prácticas corruptas, el Congreso recién se dignó a censurarlo esta semana, tras meses de hacerse públicas evidencias de su participación en dichas cuestiones oscuras. Horas antes, en una maniobra burda y ridícula, Alvarado pretendió frenar la prerrogativa del Congreso presentando una acción de amparo en el Poder Judicial. ¿Por qué la desesperación por seguir siendo Ministro? ¿Tan indispensable es la inmunidad que da el puesto? Ya era tarde, la guillotina ya estaba afilada.
La Fiscalía ha anunciado que solicitará el impedimento de salida de Alvarado. Lamentablemente, el pedido llegará tarde. Y el Congreso comparte la responsabilidad de esto al haber dilatado la salida de Geiner, el longevo intocable.
¿Qué le espera a este personaje? Lo más descarado sería que Pedro Castillo lo nombre ministro en otra cartera. ¿Cómo? ¿Nombrar a un ministro censurado no sería “el colmo”? Sí. Pero ya lo ha hecho antes. Como lo hemos explicado anteriormente, ya vivimos en “El Colmo” (ver aquí).
Sin embargo, lo más realista sería presumir que en pocos días u horas nos enteremos que el ex Ministro se encuentra no habido, siguiendo los pasos de su ex compañero Juan Silva. Por lo pronto, Alvarado ya pidió que se le quite el resguardo policial (primer paso que dio Silva antes de desaparecer). No hay que ser vidente para saber qué es lo que pasará y quiénes lo van a ayudar desde el poder a huir.
¡Qué triste! ¿No? Los funcionarios que más duran en este Gobierno caótico no permanecen en sus puestos por ser los mejores. Todo lo contrario, los que tienen mayor estabilidad resultarían ser los más cercanos a ser “cómplices”.
Foto: Fuente Congreso. Tomada de https://rpp.pe/politica/congreso/geiner-alvarado-investigado-ministro-nego-imputaciones-en-su-contra-durante-interpelacion-noticia-1429923