Por Ricardo Gálvez del Bosque
Es parte del escenario habitual el observar que las municipalidades cierran intempestivamente algunos negocios por nimiedades. En vez de usar el sentido común, algunos inspectores que dicen hacerse a los legalistas, buscan la sinrazón para encontrar un motivo absurdo para que un negocio – que da trabajo formal y sostiene a muchas familias – pase por el infierno burocrático de sus oficinas.
Papeles, estupideces, tiempos de trámites ridículos, sellos, errores “oportunos”, explicaciones irracionales. Ese es el camino para “acogotar” al pequeño empresario formal que con mucho esfuerzo hace patria invirtiendo sus ahorros en un negocio que, para colmo, no tiene ningún apoyo estatal. Y no nos referimos a beneficios extraordinarios, sino a la básica estabilidad jurídica y la mínima seguridad frente a la delincuencia. Bueno, pues, sumado a estos problemas, el empresario peruano se encuentra a merced de los mercenarios municipales que “buscan algo” para que “les debas algo” por dejarte trabajar.
Por otro lado, los ciudadanos estamos expuestos a los trámites burocráticos engorrosos y sin sentido por los que nos hace pasar el Estado para adquirir algún documento, algún certificado o un simple pasaporte. Irracionalmente (e intencionalmente) diseñan un camino para que “pasemos” por varias ventanillas y diferentes “voluntades” con sellos y aprobaciones ridículas para gestionar algo que el sentido común nos dice que debería ser simple.
Así también aparecen páginas web de servicios que colapsan, sistemas que antes funcionaban perfectamente bien y ahora tienen dificultades desesperantes. Pasan los meses y años, y no solucionan – oportunamente – esas deficiencias que bien podrían repararse en cuestión de semanas. ¿Por qué? ¿Porque los encargados son limitados mentalmente? Sí, seguramente hay de esos. Pero, ¿no será que sucede lo que es un secreto a voces? ¿No hemos escuchado, por ejemplo, de una mafia de tramitadores que te pueden facilitar una cita para sacar pasaporte inmediatamente previo pago cuantioso?
Todo esto nos hace pensar que están aquí presentes los síntomas de la metástasis de la corrupción, solo que muchos – por temor a volver a ser víctimas o sufrir represalias – decidimos callar. Todos lo sabemos, nadie dice nada. Mejor no mover el lodo, sino nos manchamos más.
Así, las mafias están tranquilas, no tienen necesidad de disparar, de amenazar. Y es que saben que nadie los enfrentará, nadie los combatirá directamente, todos nos subordinamos resignados. Además, están estrechamente vinculadas a los políticos de turno.
Por otro lado, parte de la sociedad peruana, de manera insensata actúa de forma ilógica ante este fenómeno. Y es que aquel que decide denunciarlos puede terminar sufriendo dos consecuencias inmediatas:
- Peligra su situación dado que el sistema no lo protege, y más bien protege absurdamente a quien comete hechos ilegales garantizándole impunidad. Este hecho empodera a quien está en falta y permite que pueda amenazar a quien lo denuncia y a su entorno. Los daños que le pueda ocasionar a la víctima jamás serán reparados “porque estamos en el Perú, pues”.
- Le cae encima el juzgamiento mediático de parte de la sociedad que, si bien puede estar de acuerdo con la denuncia que está haciendo la víctima, inmediatamente la señala y culpa de cualquier consecuencia que pueda sufrir por atreverse “irresponsablemente” a cuestionar o denunciar el status quo. “¡Ah, pues! ¿Para qué reclamaste? ¡Tú solit@ te arriesgaste!”. Actúan muy parecido a cuando, ante el acoso callejero en contra de una mujer, comentan: “¿para qué se vistió así, pues?”
Si seguimos en silencio ante esta situación, estaremos condenados a vivir en medio del chantaje y la falta de respeto a las leyes. Salvo que algún caso sea demasiado escandaloso. Porque, lógicamente, “Dios perdona el pecado pero no el escándalo”.
No deberíamos estar tan tranquilos reconociendo una realidad vergonzosa que todos sabemos que existe y nadie la menciona en voz alta. Quizás no sufrimos la violencia que se vive en otros países porque aquí nadie se atreve a encarar y enfrentar a las mafias, simplemente convivimos con ellas pacíficamente.
Imagen: Composición Punto Medio. Imagen principal tomada de https://lamenteesmaravillosa.com/las-ventajas-que-nos-aporta-el-silencio/ . Pasaportes: Difusión. Granja Azul, tomada de https://www.apnoticias.pe/peru/diario-peru21/trabajadores-protestan-por-cierre-de-la-granja-azul-1066131 . Corrupción: Fuente IPE, tomada de https://idehpucp.pucp.edu.pe/analisis1/a-proposito-del-ipc-del-2022-como-vamos-en-la-lucha-contra-la-corrupcion/