Por Ricardo Gálvez del Bosque
En los últimos meses, este Congreso ha logrado sembrar el escenario propicio para que el autoritarismo se instale en el Perú en las próximas elecciones. Con sus decisiones prepotentes, que han debilitado la separación de poderes y la institucionalidad, pretenden arrasar con lo poco que le queda para defenderse a nuestra alicaída democracia.
Veamos:
Se puede violar la Constitución fácilmente
Para darle una mano – pronto sabremos a cambio de qué – a la Presidente Boluarte para que pueda viajar al extranjero durante su gestión, han aprobado una modificación de la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo que contradice abiertamente a la Constitución. En sencillo, han violado la Constitución y han abierto una caja de Pandora que difícilmente se podrá cerrar en el futuro.
En el futuro, quienes obtengan el poder podrán recurrir a este mecanismo inconstitucional para conseguir sus objetivos. Si el capítulo económico de la Constitución dice A, ¿por qué no será posible, bajo ese mismo criterio, sacar una ley que diga Z?
Adiós separación de poderes
Han ejecutado una venganza coordinada para inhabilitar a una fiscal suprema porque no les gustó su proceder. De esta manera, el Congreso se ha arrogado un súper poder inconstitucional que podrá someter a jueces y fiscales, poniéndolos en raya frente al poder político de turno.
Adiós organismos electorales autónomos
Están ejecutando la manera inconstitucional de someter, también, a los jefes de los organismos electorales constitucionalmente autónomos. Bajo leguleyadas y despropósitos pretenden, por un lado, someterlos a juicio político si no son del agrado del poder político de turno.
Por otro lado, algunos congresistas sin la mínima preparación jurídica, pretenden acusar e inhabilitar al jefe del JNE arguyendo absurdamente que éste también es juez supremo por lo que puede ser defenestrado por el Congreso. De esa manera, quien obtenga el poder en las próximas elecciones podrá fácilmente realizar las mismas prácticas y hacerse del poder electoral. (¡Viva Venezuela!)
Copamiento del Sistema de Justicia
Pretenden, también, acusar constitucionalmente a la Junta Nacional de Justicia. Si logran ese propósito, también le abrirán las puertas al siguiente grupo político que llegue al poder para que pueda tomar control de todo el sistema de justicia peruano.
Omnipotentes y sin control político
Han logrado que un Tribunal Constitucional (TC), subordinado a los intereses de quienes eligieron a sus miembros, le otorgue al Congreso iniciativa de gasto. Con esa herramienta, los congresistas futuros podrán “ofrecerle sus servicios” al Ejecutivo de turno para cumplir con sus agendas mercantiles. ¿A cambio de qué? ¡De sus votos! Además, se han inmunizado frente a cualquier intento de control judicial sobre sus aberrantes decisiones.
Inmunidad garantizada
Le han puesto más candados a la herramienta de la colaboración eficaz, resguardando sus espaldas ante posibles denuncias que puedan caer sobre ellos y los políticos que lleguen al poder por casos de corrupción. Cada vez serán más intocables, y las denuncias les resbalarán como mantequilla.
Adiós competencia electoral
Ahora, pretenden inhabilitar a cualquier político que quiera participar en contiendas electorales con denuncias llenas de falsedades.
Según algunos congresistas con visión corta y fanatismo vergonzoso creen que en esta estrategia – que han ejecutado con absoluta vehemencia – lo que están haciendo es fortalecer su posición política. Según ellos, ni el caviarismo ni el rojerío podrán acceder al poder ahora que “están ordenando la casa”.
Recordémoslos en el momento en que nos enfrentemos a una elección entre dos autoritarismos que, fácilmente, se harán de todo el poder tras ganar una futura contienda electoral. Que no se escapen de su responsabilidad: ellos pusieron la mesa, abrieron la puerta y colgaron el letrero de “Pase y sírvase”.
Imagen tomada de https://paselibre.net/placeres/la-mesa-esta-servida-5-recetas-de-entradas-ricas-y-faciles/