Por Ricardo Gálvez del Bosque
Una maniobra imprudente, en el marco del comportamiento vial automovilístico, es definida como un acto descuidado, un error del conductor. Éste puede poner en peligro a uno mismo y a terceras personas. No hay dolo, pero – como su nombre dice – hay una imprudencia.
La actuación de algunos fiscales del Equipo Especial Lava Jato, se asemejaría a la de estos conductores. El caso más saltante parecería ser el del fiscal José Domingo Pérez. Dicho personaje obtuvo la gracia y el aplauso del público cuando empezó a anunciar, mediáticamente, las investigaciones contra poderosos que estaba realizando. Era la estrella del momento, y él parecía sentirse todo un rock star.
Como a muchos les pasa, la fama habría empezado a subírsele a la cabeza mientras su presencia en medios se hacía cada vez más frecuente. Gracias a “extrañas y oportunas” filtraciones, la prensa se enteraba de futuros implicados, declaraciones de colaboradores eficaces, etc. Y ahí estaba Pérez, con su dedo acusador.
Pérez, rápidamente se convirtió en un campeón en lograr que se le impongan, a diestra y siniestra, medidas privativas de la libertad a la mayor parte de sus investigados. Algunos incautos creían que las audiencias y solicitudes del famoso fiscal se trataban de juicios orales, y que la medida requerida (en su mayor parte, adoptada) terminaba siendo casi como una sentencia. La mayor parte de la población, sin formación jurídica, festejaba al ver cómo desfilaban enmarrocados muchos personajes hacia la carceleta del Poder Judicial.
¡Se está haciendo justicia!, creían muchos. Bastante alejado de la realidad, para ser francos. En verdad, lo que se estaba anunciando eran grandes investigaciones y procesos largos. Y un poco de ajusticiamiento mediático (no hay que obviar lo evidente). Se impartía una justicia extraña, sin condenas, sin sentencias, sin juicios. Paciencia, pensábamos. Con tantos elementos de convicción, con tanta vehemencia, los casos caerían por su propio peso pronto. Era cuestión de tiempo, nomás.
Han pasado muchos años desde que todo el show empezó, y la película se ha vuelto un largometraje sin fin. Ni los casos más redondos han logrado concluir en sentencia (como el de Susana Villarán, por ejemplo). Es más, en el camino hemos visto cómo jueces tienen que devolverle una y otra vez sus acusaciones por defectuosas, para que las subsane. Mientras tanto, muchos de los señalados por el rock star de la fiscalía siguen viendo pasar las horas.
En medio de esta tarea inconclusa, Pérez pretendió abandonar el barco sin que éste siquiera haya zarpado. Así, decidió postular para convertirse en juez en medio de una maniobra que hoy calificamos de imprudente. Y es que, como primer paso tenía que rendir un examen de conocimientos jurídicos que, como nos enteramos este domingo, ¡no pasó!
Efectivamente, el señor tiene el derecho a postular a un ascenso o a un movimiento de carrera profesional. Pero, vamos, es un poco irresponsable presentarse sin haber culminado su tarea (y en algunos casos sin siquiera haberla empezado) y sin prepararse.
Uno se preguntaba, hasta hace poco, cómo podía ser posible que el Poder Judicial le devuelva “n” veces sus acusaciones a dicho fiscal para que las subsane y luego persista presentando más errores. Pues, con los resultados de su postulación pareciera que muchos podríamos creer ya tener la respuesta en nuestras manos.
Sí. Pérez ha demostrado coraje y fortaleza para investigar a gente muy poderosa. Eso no se puede menospreciar ni dejar de apreciar. En medio de un sistema que parece estar podrido, generó expectativas. El problema es que, aparentemente, se quedó en eso: expectativas. Y para que cambie esa percepción su obligación es la de entregar resultados.
No dudamos que esta última maniobra imprudente vaya a ser utilizada duramente por sus investigados para desprestigiar toda su labor. La fama es pasajera y el prestigio se gana con trabajo arduo en el transcurso de mucho tiempo, con resultados. Y ambos se pueden perder por una imprudencia temeraria.
Imagen: GEC. Tomada de https://peru21.pe/politica/fiscal-jose-domingo-perez-no-aprobo-el-examen-de-conocimiento-para-ser-juez-superior-fiscal-jose-domingo-perez-no-aprobo-examen-juez-superior-eliminado-odebrecht-lava-jato-noticia/