Por Gabriel Moreno Alcántara
Durante más de 4 años fuimos testigos de la infinidad de recursos que interpuso Alejandro Toledo ante la justicia estadounidense en aras de anular o retardar su (inevitable) extradición al Perú. Muchas personas creían que efectivamente lograría vulnerar a la justicia, pero esta a veces tarda pero llega. La semana pasada, Estados Unidos denegó el último recurso de urgencia para anular su extradición al Perú; por lo tanto, el juez Hixson ratificó su decisión que el viernes 21 se entregue a las autoridades de San José – California a las 9am para continuar céleremente con los procesos para su retorno al país. Y vaya que fueron súper ágiles: ¡el sábado se conoció que Toledo arribaría a las 7:30am del domingo 23 a Lima en un vuelo comercial!
Al día de hoy, ya son 3 expresidentes que tenemos en el penal de Barbadillo. Fujimori con sentencia firme, mientras que Castillo y ahora Toledo con prisiones preventivas hasta que los juicios den inicio y se conozcan las sentencias respectivas. Sin duda, es un hito mundial que el Perú logre obtener justicia ante eventuales delitos de sus ex altos dignatarios. En muchos otros países, expresidente huyen o mueren sin haber pagado por sus crímenes. Ahora bien, los mismos ojos internacionales estarán atentos a que los procesos contra Toledo y Castillo se den respetando el debido proceso y el peso de la carga probatoria; es decir, con imparcialidad y contundencia de pruebas.
Ahora bien, recordemos que la extradición de Alejandro Toledo versa sobre el caso de corrupción por la Carretera Interoceánica y las coimas que habría recibido de Odebrecht con tal de ganar la licitación; no obstante, el expresidente ‘peruposibilista’ tiene otro proceso en curso. Se trata del caso Ecoteva, en el cual también están involucradas Eliane Karp y Eva Fernenbug, esposa y suegra, respectivamente. Este caso de lavado de activos tiene aún pendiente la extradición material de Karp y la extradición legal de Toledo. Pero, si Toledo ya llegó a Peru, ¿no se le puede procesar por todos los casos pendientes? La respuesta es no. La justicia de por sí es procedimental y parte del debido proceso conlleva cumplir todas las fases del proceso. Alejandro Toledo tiene que recibir formalmente el aval de extradición estadounidense para que acá en Perú pueda continuársele el proceso por el caso Ecoteva. La extradición de Karp es un tema aparte y resulta que esta sería más complicada al no ser peruana y tener nacionalidades de países que no tienen costumbre de extraditar a sus connacionales.
Los próximos meses serán claves para que la justicia peruana continúe consolidándose como una que, si bien aún tiene la debilidad de tardar un tiempo excesivo para cerrar procesos, cuenta con la fortaleza de lograr condenas justas para altas autoridades que cometieron delitos amparándose de sus cargos públicos y tomando, en muchos casos, el dinero de todxs lxs peruanxs.
Imagen tomada de https://aptitud.pe/en-portada/alejandro-toledo-llega-a-peru-extraditado-desde-los-ee-uu/