Por Ricardo Gálvez del Bosque
El día de ayer, finalmente, el Congreso se puso las pilas y ejerció su labor de fiscalizar al Ejecutivo al presentar una moción de censura contra el Ministro del Interior, Willy Huerta. Dicha censura sería programada en las próximas horas, y podría ser debatida este mismo viernes o la próxima semana.
¿Se está presentando tarde? A nuestro parecer sí, dado que desde que Huerta asumió cargo el 19 de julio de este año, la labor que ha cumplido dicho Ministro ha sido la de entorpecer el trabajo del equipo especial de la Policía que está colaborando con la Fiscalía que investiga a Castillo y su entorno.
El intento de apartar a Harvey Colchado con un memorándum – aparentemente con firmas falsificadas – fue la cereza de la torta. Y es que la gestión de Huerta se caracterizó por los cambios intempestivos de los altos mandos de la Policía, con la intención de seguir la línea de la defensa del Presidente Castillo que solicitaba la destitución de Colchado.
Si las bancadas del Congreso de aquellos que firmaron dicha moción actúan bajo una misma línea, la suerte de este ministro estaría echada. Sin embargo, el problema seguirá en el poder y tiene nombre y apellido: Pedro Castillo, quien los nombra.
Dado que han quedado claras las verdaderas intenciones de este Gobierno, vemos difícil – en verdad, imposible – un cambio de estrategia facilitándole la labor a la Justicia peruana. La tarea de fiscalizar con eficiencia queda en manos de este Congreso con altísima desaprobación lograda a pulso. Si la ciudadanía no se hace escuchar, los congresistas podrán seguir manteniendo el atrevimiento de preguntarse en público sobre la existencia de una crisis política que no les conviene ver.
Imagen: Composición Punto Medio. Fuente Ministerio del Interior. Tomada de https://www.gob.pe/institucion/mininter/noticias/633339-willy-huerta-olivas-jura-como-nuevo-ministro-del-interior