Por Gabriel Moreno Alcántara
Definida la mesa directiva congresal, pasadas las fiestas patrias y habiendo oído el mensaje a la nación por parte del presidente Pedro Castillo, concluimos que sin cambios medulares no saldremos adelante de la honda crisis actual. El jueves 28 fuimos testigos de un discurso plagado de fantasías, cifras infladas de ceros y realidades “maravillosas” dignas de países de primer mundo. ¿Hubo autocrítica? Ninguna… ¿se dio cuenta de los fracasos o errores en este primer año de gobierno? De manera muy escueta. En otras palabras, para Pedro Castillo y su gobierno, el país avanza a paso firme por encima de la pandemia, viruela del mono, la inflación y la fuerte recesión económica; qué maravilloso, ¿no? Nada más irresponsable y alejado de la realidad. Aún no se concreta la llegada de cantidades masivas de fertilizantes importados que permitan dinamizar y no parar la cadena de cultivos a nivel nacional. Esto a pesar que en su mensaje el presidente afirmó que estos llegaban en agosto. Ayer, domingo 31 de julio, en una serie de tuits, revelaba que daba una ampliación al plazo hasta octubre para la compra de estos importantes insumos para la siembra. Hace meses estamos en este problema de desabastecimiento dada la guerra entre Rusia y Ucrania y el gobierno no puede concretar la compra…así de crudo. ¿Cómo el gobierno va a responder si durante agosto o setiembre se da una severa escasez de hortalizas, legumbres o tubérculos? Una duda abismal.
Por el lado periodístico y fiscal, más y más pruebas a la par de confesiones se van conociendo sobre varios casos. El más reciente apunta a Bruno Pacheco, quien ahora viene dando información importante a la Fiscal de la Nación en calidad de colaborador eficaz. Se espera que pueda dar evidencias y pistas clave que permitan esclarecer los serios cuestionamientos que rondan a Pedro Castillo y exfuncionarios de su gestión. Asimismo, corre el rumor que el exministro MTC, Juan Silva, estaría próximo a entregarse a la Justicia con la finalidad de brindar información relevante que él pueda también tener. ¿Y por qué? Pues el hecho de acogerse a la colaboración eficaz parte de la condición de brindar pruebas y hechos inéditos y contundentes. Ahora que Bruno Pacheco está avanzando por su lado, la situación legal de Silva se complicaría de no quedarle información relevante, lo que complicaría su situación judicial en aras de lograr una reducción significativa de una futura condena. Por lo pronto, queda esperar y enterarnos a través de la prensa en qué nuevos hechos estaría vinculado el presidente de la República y quiénes más habrían participado en los diversos casos de investigación, así como conocer a l@s beneficiari@s de obras, favores y demás prebendas; por ejemplo, los nombres de los 6 o 7 “Niñ@s” congresistas extras.
Por otro lado, corren rumores que antes de fin de año se presentaría una nueva moción de vacancia, con mejor redacción y soporte de evidencias, que permita remover al presidente por la “permanente incapacidad moral”. No obstante, el Congreso concluirá primero con el proceso sancionador contra Dina Boluarte, a quien se le busca inhabilitar de la función pública por infracción a la Constitución al haber firmado papeles como miembro del directorio del Club Departamental Apurímac cuando era ya ministra de gobierno (funcionaria pública). Este caso estaría redondo y sólo se espera culminar los procesos y plazos legales para poder debatirse y votarse en el pleno del Congreso, necesitándose 66 votos descontando los de la Comisión Permanente. Ahora bien, seamos sinceros, señores…no habría los 87 votos para vacar al presidente; se ha dicho en enésimas oportunidades. Es más, se ha dado a conocer a través de un reportaje de Punto Final que el congresista Héctor Acuña estaría próximo a presentar la conformación de una nueva bancada parlamentaria que jalaría a actuales congresistas de las bancadas de AP & APP, mismos que tendrían un corte de Centro, pero con guiños hacia el oficialismo. Lo que se logró desde las sombras (y en mi opinión, parte de la astucia política de Cerrón) fue primero “comprar” los intereses del número elemental de congresistas para bloquear los 87 de la vacancia y lo que ahora se estaría negociando tras bambalinas sería incluso taponear los 66 sin la Permanente para tentar conseguir una suspensión o acusación constitucional, aun cuando expert@s indican que esto no podría darse por la alta investidura de Pedro Castillo. La jugada es clara…buscan dejarnos en el statu quo hasta el 2026, ¡increíble!
Bajo el estado actual de las cosas, no podremos salir de la crisis política que carcome al país y a la esperanza de lxs peruanxs. El Congreso actual debe centrarse de una buena vez en plantear las reformas constitucionales pertinentes para conseguir en un año las salidas que requerimos. No podrá vacarse ni inhabilitarse al presidente, parece ser. Tampoco habría la voluntad política para presentar un proyecto de adelanto de elecciones e irse tod@s porque justamente son l@s propi@s congresistas quienes quieren aferrarse a sus curules y quedarse a como dé lugar los 5 años de periodo. Entonces, antes de estar enfocados en llevar a referéndum la bicameralidad, permitan que sea la ciudadanía quien defina en referéndum si instaura el “impeachment” al presidente para que este pueda ser acusado por delitos comunes durante su mandato. Creo que lo conseguiríamos, me uno, con un amplio margen; y para ello, sólo necesitamos de este mediocre Congreso que el proyecto de ley lo aprueben con 66 votos. Del respaldo popular nos encargamos todxs nosotrxs. Sin este cinturón político y criterio reformador, no conseguiremos salir adelante. Mente visionaria y desprendida, ¿no que el Perú era siempre primero? ¡Demuéstrenlo pues, (el adjetivo lo dejo a ustedes)!
Foto tomada de https://convoca.pe/convoca-verifica/reportaje/las-verificaciones-del-discurso-presidencial-de-pedro-castillo