Por Ricardo Gálvez del Bosque
Van pasando los años desde que estalló el escándalo de Lava Jato y nos vamos acostumbrando a que la Fiscalía no nos ofrezca resultados concretos sobre los casos. El show mediático y el espectáculo farandulero parecen ser los únicos logros de una fiscalía que va a paso de tortuga. Es cierto que, la carga procesal, el obstruccionismo bajo leguleyadas de ciertos equipos de defensa legal, la lentitud del sistema de justicia son moneda corriente en los litigios, pero, ¿esto los justifica?
La mayor parte de la población creyó, al ver en vivo y en directo a José Domingo Pérez debatir con Giuliana Loza, que en el 2019 estábamos frente a un juicio. Nada más alejado de la realidad: era la discusión sobre si correspondía aplicar medidas preventivas de privación de la libertad a Keiko Fujimori y sus allegados dado que se encontraban bajo investigación fiscal. Pero, claro, para el ojo común ver a un fiscal y a un abogado frente a un juez, y que dicho encuentro concluya con el encarcelamiento de distintas personas puede resultar algo confuso.
Lamentablemente, la Fiscalía ha tenido a la población entretenida con prisiones preventivas y preliminares, acusaciones mediáticas, pero al final de cuentas cero sentencias. Cero. ¿Qué está pasando? ¿Nos estamos acostumbrando a ver un show y a no encontrar justicia concreta?
Están el caso redondo de Susana Villarán que no llega aterrizarse en absolutamente nada, el caso de PPK que llevó 3 años en prisión domiciliaria sin que se le llegue a juzgar, el de Keiko Fujimori que sigue en el plan de “¿la metemos a prisión preventivamente o no?” pero que no llega a juicio. También sigue en el limbo el caso de Nava que todo el mundo parece haber olvidado tras el suicidio de Alan García. Y ni qué decir de los casos de Humala y Heredia, a quienes se les metió en la cárcel y se les embargó bienes sin avances concretos.
Así vamos. Los vemos dando paseos en círculos y logrando explosivos titulares que se quedan en el papel con tinta de los periódicos. Hasta ahora, estos solo sirven para envolver pescado.
Una muestra sintomática del norte que parecieran tener los fiscales se pudo observar en la última audiencia que se tuvo sobre las investigaciones que pesan sobre Martín Vizcarra (otro caso que está en nada). En ella, el fiscal tuvo el infortunio de decirle al juez lo siguiente:
“Si miente para salir con una persona que no es su esposa, ¿por qué no mentir a la justicia o a su juzgado?”
¿En serio? ¿Esa es la lógica farandulera de la Fiscalía? ¿Show? ¿Titulares? ¿Comentarios fuera de lugar que exciten a la plaza pública? ¿Qué demonios le interesa al Sistema de Justicia peruano con quien se acuesta o no se acuesta algún político? ¿Está en una audiencia o en el programa de Peluchín? Francamente, triste y deplorable.
¿Tienen algo concreto contra algún implicado? Investiguen, lleven a juicio y consigan sentencia. Pero, ¡vamos! Estamos bastante cansados de los espectáculos y las filtraciones que solo consiguen condena mediática. Para chismes ya existen bastantes programas faranduleros en televisión nacional.
Imagen: Composición PUNTO MEDIO. Fiscal Osías Castañeda: Justicia TV. Rodrigo González: Instagram. Tomada de https://rpp.pe/famosos/farandula/que-dijo-rodrigo-gonzalez-peluchin-sobre-su-ruptura-con-sean-rico-y-su-renuncia-a-valgame-dios-noticia-1230595 . Martín Vizcarra tomada de https://www.aporrea.org/internacionales/n360172.html