Por Ricardo Gálvez
El lunes, a las 3pm, empieza el show de la vacancia presidencial. ¿En qué consiste este remake de la película original que vimos en el Gobierno de PPK?
-
- En el primer acto veríamos la presentación de Pedro Castillo con su abogado. No se sabe si hablarán los dos o solo uno de ellos, pero intuimos que el discurso será uno de victimización y varias mentiras (o medias verdades, como las quieran llamar, tipo “No me reuní con Karelim y su propio abogado lo confirma”).
- En el segundo acto, lo que presenciaremos es un debate caldeado, lleno de insultos de ida y vuelta entre la oposición y el oficialismo. Gente vociferando sobre la dignidad, la democracia, los pactos bajo la mesa, el terrorismo, la incapacidad, la corrupción. Para las cámaras, presenciaremos a una oposición que finge ser durísima con un Gobierno al que consideran impresentable. Si tenemos suerte, podremos presenciar algún discurso digno para memes, como aquel de Yeni Vilcatoma hablando de Condorito…¡que es chileno! Dudamos que el nivel del debate haga que nuestros congresistas queden aturdidos por no saber quién es Montesquieu como cuando Borea ejerció la defensa de PPK. Pero está casi garantizado que veremos papelones.
- En el tercer acto, empezará la votación. Es ahí donde la gente empezará a hacer las matemáticas y ver si se mantienen los 44 votos sólidos que impedirían que se concrete una destitución. Empezará el desconcierto de muchos al ver cómo congresistas que han sido parte del grupo que vociferaba “vacancia” votan por la permanencia de Castillo, y quizás por ahí veremos algún voto en el sentido contrario. Finalmente, si nada extraordinario sucede, la película terminará con Pedro Castillo mandando un tuit agradeciendo el respaldo de los parlamentarios que lo mantuvieron en el puesto, y dando alguna arenga típica que hable del “pueblo”.
Película repetida, ¿no? Sin embargo, lo importante no es lo que veremos en televisión sino todo lo que sucederá tras bastidores. Esta es una grandísima oportunidad para que todos los parlamentarios mediocres negocien sus votos con el Ejecutivo y con la oposición. Los pedidos pueden ir desde oficinas más grandes, puestos de trabajo, obras en las que puedan comisionar, ministerios, beneficios para sus familiares, comisiones parlamentarias, indultos, reelección congresal. Es una feria maravillosa, en la que todo estará con descuentos insuperables. Muchos estarán felices, vendiéndose al mejor postor.
Otra información interesante que podremos sacar será la identificación de quién es quién en la oposición (dado que lo más probable es que el oficialismo no muestre mucho desbande, de no suceder algo extraordinario este fin de semana). Es decir, quizás podremos ver con mucha más claridad cuántos “Niños” hay en el Congreso, y así en las próximas semanas ver cómo la prensa destapa qué favores recibieron a cambio.
Así que, nos disculpamos por haber spoileado parte del show del lunes. Es un remake y creemos que no superará a la obra original, pero tendrá algunos añadidos pintorescos. Sin embargo, creemos que no hemos robado el encanto que tiene el observar “¡qué canten los niños, que alcen la voz! ¡Que hagan al mundo escuchar!”.
Imagen: Idea original del tuit de @abelcalloapaza. Adaptación propia