Por Ricardo Gálvez
El fin de semana pasado se realizó en Lima una marcha a favor de la vacancia de Pedro Castillo. En un país en el que, según las encuestas, una mayoría de peruanos desaprueban la gestión actual, la congregación fue bastante pobre. Sobre todo, considerando que la capital peruana es la que más rechaza al Presidente Castillo. ¿Por qué la gente no se anima a marchar para protestar contra un Gobierno precario, mediocre y con varias denuncias de corrupción en su haber?
Los líderes políticos
Es difícil que la gente se anime a protestar bajo el liderazgo de figuras políticas quemadas por su propio desempeño. Una marcha convocada por “fraudistas”, conspiranoicos, y extremistas no va a lograr una gran acogida entre la población. Lourdes Flores, Jorge Del Castillo y Raúl Diez Canseco no son referentes populares, sino más bien personalidades políticas rechazadas por sus actitudes políticas en el pasado reciente. Su presencia o liderazgo, más bien, genera rechazo. Son más de lo mismo.
Influencers mediáticos
Escuchar alaridos irracionales de parte de “opinólogos” de redes como la señora Thais, francamente desconcierta. Usar ese tipo de “liderazgos” para conseguir adeptos es absolutamente contraproducente, ya que los mensajes que este tipo de personajes lanzan no unen y más bien dividen (racismo, clasismo, terruqueo, fantasías de fraude, furia contra el centro, conspiraciones). Pretender que la gente acompañe masivamente a este tipo de interlocutores es síntoma de vivir en una burbuja en donde no cabe el pensamiento crítico y todos se aplauden sus propias bravuconadas.
Puertas cerradas
“Yo no marcho con caviares”, “Fuera el centro y la izquierda, no son bienvenidos”, son algunos de los lemas que se han promocionado para dicho encuentro. En vez de darle la bienvenida a voces que están preocupadas por el destino del país en manos de Castillo, esta marcha pretendía solo recibir a la gente que esté 100% de acuerdo con la agenda que sus líderes plantean.
La marcha espontánea que se produjo cuando el Congreso anterior destituyó a Martín Vizcarra no fue excluyente. Nadie dijo “ah no, si tú votaste por mengano, yo no marcho contigo”, o “solo los que somos de centro izquierda marchamos”, o un “que no vengan los derechistas”. Nadie se preguntó quién era quién, había un sentimiento común de indignación y se manifestó espontáneamente.
La oposición repele
Mucha gente puede querer que Pedro Castillo sea vacado, sin embargo, existe una similar repulsión por la oposición radical que representa el fujimorismo y sus variantes. Observar que distintas bancadas de oposición se unen en el Congreso para acelerar la descomposición del Estado, genera desesperanza. No olvidar que las marchas se gestan en busca de un objetivo que traiga consigo una esperanza para aquel que protesta.
El Gobierno de Pedro Castillo indigna a muchísima gente de todas las ideologías, de diferentes estratos sociales. Sin embargo, ciertas élites (que para colmo manejan recursos importantes) se niegan a entender que el mundo es más grande que sus clubes privados y sus condominios enrejados. Es bastante irónico que – habiendo sido privilegiados con un mejor acceso a la educación – no se den cuenta que, para lograr su objetivo, lo único que tienen que hacer es constatar que existen personas que piensan diferente a ellos pero que pueden tener en común algunos argumentos. El querer imponer su pensamiento radical bajo la lógica prepotente del estás conmigo o estás contra mí, y no buscar los puntos que generen consenso lo único que logra es que finalmente se queden solos en su radicalismo.
Por último…¡las formas! Además de lanzarse a marchar con banderas como la Cruz de Borgoña y simbolismos absolutamente fuera de lugar, ¿cómo se les ocurre poner a liderar un grupo a uno de los Wong con su scooter eléctrico rodeado de guardaespaldas? ¿Es en serio? ¿No se dan cuenta del ridículo que hacen? ¡Si éstas son nuestras “élites” queda claro por qué estamos como estamos!
Imagen: Fuente Twitter, La República https://larepublica.pe/politica/2021/08/21/lourdes-flores-juan-sheput-y-jorge-del-castillo-son-recibidos-con-protestas-en-arequipa-lrsd/